Pues bien, en ocasiones, el formato, presentación y contenido de los exámenes de las unidades didácticas es lo que hace que el alumno sepa responder o no a lo que se le pide y, por tanto, no podamos saber con certeza si el alumno ha alcanzado o no los objetivos. Ante esto, se hace necesario que sepamos cómo pueden adaptarse dichos exámenes sin que los objetivos y los criterios de evaluación sufran modificación.
Para ello, os proponemos que echéis un vistazo a un examen de un grupo ordinario de 5º de Educación Primaria para el área de Lengua Castellana. Después podéis consultar en esta misma entrada el mismo examen pero adapatado. ¿Cuál pensáis que favorece que nuestro alumnado con TDAH pueda obtener resultados exitosos?
La modificaciones que se han realizado giran en torno a:
- El formato (sencillo, claro, una pregunta por página).
- Contenido (instrucciones al inicio, puntuación por poner nombre y fecha).
- Formulación de preguntas (cada actividad pregunta por un solo contenido y solo una actividad por contenido - no se vuelve a pregunta de nuevo lo mismo en otra pregunta).
- Guías de respuestas (incluyendo ejemplo resuelto al inicio de la actividad y espacios marcados para las respuestas).
